Mi nombre es Natalia Muñoz Calvo y agradezco la oportunidad de compartir con ustedes mi experiencia en el Colegio Del Valle.
Ingresé al colegio el año 1997 y soy generación 2000. Tuve muchos amigos que recuerdo con gran cariño como mi gran amiga María José Villalobos, pero mi mejor amiga indudablemente fue Natalia Elizondo Abarca, con la cual luego compartí además la Universidad y es ahora mi colega.
Mis recuerdos de recreo son sentados en el piso o en las bancas del gimnasio compartiendo y comiendo. Sin celulares ni mucha tecnología conversábamos y disfrutábamos mucho.
Siempre me incliné por las ciencias y mi materia favorita fue Biología. Mi sueño en ese entonces era ser médico, como mis padres, con vocación de servicio.
Estuve en algunos clubs como por ejemplo francés y no fui asidua a ningún deporte hasta que llegué a la universidad.
Gracias a recientes conversaciones con mi amiga Natalia Elizondo recuerdo anécdotas, como el desfile del 15 de setiembre del año 1999, con una temática basada en representar diferentes épocas y civilizaciones del mundo (ella vestida de egipcia y yo de “futurista”). Vislumbrando el futuro y ese incierto cambio de siglo que vivíamos con incuestionables ansias.
Recuerdo que al no tener celulares nuestras conversaciones eran con “papelitos” que nos pasábamos entre compañeros de forma cómplice y risueña. Pero, por mucho, mis más gratos recuerdos fueron los paseos a diferentes zonas del país.
Desde el Chirripó hasta el volcán Arenal, pasando por Río Celeste. Eran paseos en los que nos mostraban las maravillas de nuestro país y por medio de los cuáles indirectamente nos inculcaban responsabilidad y compañerismo.
Desde mi punto de vista el Colegio del Valle de esa época fue sinónimo de diversidad, ya que se contaba con alumnos y profesores extranjeros; además, llegaban compañeros de intercambio y sin saberlo, nuestro aprendizaje era más libre y ligado al respeto a las culturas diversas. También al ser tan pocos compañeros siempre sentí un ambiente de familia sin igual. Para mí recordar el Colegio del Valle es recordar a una afanada Teacher Linda preocupada siempre por todos.
Actualmente soy Farmacéutica y trabajo para la Red de Servicios de Salud del Instituto Nacional de Seguros INS.
Mi tiempo libre lo dedico por entero a mi familia; disfruto salir a correr y compartir con mis dos amados perros. En tiempos tan convulsos como los de ahora, siendo un trabajador de salud, mi mayor sueño es un futuro lejos de la pandemia. Bajo una nueva normalidad, en la que la humanidad sea más empática y solidaria, con sus semejantes y demás seres del planeta.