Antecedentes
En el siglo XIX, Nicaragua pasaba por problemas políticos, el estadounidense William Walker ofrece su ayuda, aunque sus intenciones eran favorecer las políticas expansionistas y de esclavitud de su país; y aprovechando la guerra civil de nuestro país vecino, logra quedarse al mando de sus fuerzas armadas.
Ante la amenaza que esto significaba para Costa Rica, el Presidente Juan Manuel Mora Porras, conocido como Juanito Mora, hace un llamado al pueblo para conformar un ejército y defender la soberanía de nuestro país.
El 1ro de marzo de 1856, Costa Rica declara la guerra a los filibusteros y el 4 de marzo el ejército dirigido por don José Joaquín Mora, hermano del presidente marcha hacia el norte. Llegan a Liberia el 12 de marzo, donde se reúnen con el Batallón de Moracia, al mando de José María Cañas.
El 11 de marzo, el presidente de Nicaragua declara guerra a Costa Rica y el 13 de ese mismo mes, las tropas de enemigas salen con la intención de invadir nuestro país y cruzan la frontera tres días después, el 16 de marzo.
La Batalla
El 20 de marzo de 1856 las tropas costarricenses encontraron huellas del ejército invasor que se dirigían a la Hacienda Santa Rosa. Al llegar al lugar el ejército costarricense se dividió en 4 grupos para atacar a los enemigos desde varios flancos.
Después de los primeros 5 minutos, los filibusteros se atrincheraron en la casona, donde fueron acorralados. Luego de eso, se inició la huída. La batalla en total duró cerca de 18 minutos.
La victoria de nuestro ejército permitió la expulsión de los enemigos hacia Nicaragua e impidió el expansionismo estadounidense hacia el sur de América.